La leyenda del Rey Salomón.
Israel. Hasta en el palacio llegó la trifulca de las mujeres por el niño. Nunca había tenido un conflico así, ahora si necesitaba la sabiduría que Dios le había dado, el Rey Salomón ordenó a su soldado matar al niño y dividirlo en
La banda del carro rojo. (leyenda urbana)
Leyenda Urbana. En la carretera Cuernavaca-México cerca de Tres Marías, aparece un automóvil rojo deportivo, varias mujeres muy bellas con poca ropa mostrando todos sus atributos, que seducen a los hombres invitándolos una noche
La leyenda: el hombre puma
Leyenda de México. Un puma, merodeaba el pueblo hasta que atacó los corrales matando cerdos y caballos, se dieron cuenta que era un animal de grande proporciones, la gente de lugar se reunió para salir a matarlo uno de ellos fue Miguel,
El ahorcado de San Andres Tuxtla y La leyenda del Ahorcado
Leyenda de Veracruz. Se cuenta, que un joven de nombre Fernando salió de su trabajo más tarde que de costumbre pues hizo horas extras. Vivía bien lejos y pronto se iba hacer de noche, así que decidió tomar un atajo para llegar pronto
El Fantasma del Campanario: Regresó donde se quitó la vida
Leyenda de Zacatecas. Esto pasó en Fresnillo, los organistas, el sacristán, los del coro y monaguillos, de la iglesia de la Purificación que cuando terminaban sus obligaciones y bajaban por las escaleras, corrían como “pies para que
La Vampira de Mérida trabajaba como enfermera
Leyenda de Yucatán. Esto pasó hace como cien años casi en el centro de Mérida en la 73 x 42, mi abuelita nos relataba que a la vuelta de la casa vivía una mujer que no salía mucho de su vivienda. Ella era demasiada blanca con los
Leyenda La Carbonera de Chuburná Puerto
Leyenda de Chuburná Puerto Yucatán. Desde alta amar, por las noches, algunos pescadores cuentan que ven a lo lejos grupos de incendios, en los terrenos de la carbonera. Y en la playa se ven como fogatas y gente a los lejos. Se
Ahorcaron a un difunto: Leyenda Colonial
Leyenda de México. El 7 de Marzo de 1647 los vecinos de la Nueva España que transitaban por las calles delante de las Casas Arzobispales, como a las nueve horas de la mañana, veían admirados un evento muy frecuente en aquella época.