La leyenda: La mano negra.
Leyenda de Morelia Michoacán. Con un dedo de la mano le apuntaba un lugar específico de la pared de la celda del sacerdote y este lo ignoraba, no le importaba ningún tesoro. El cura era una persona de buenos sentimientos. El cura
La niña araña escalaba los muros del cementerio
Leyenda de Salamanca Guanajuato. Se cuenta que un taxista del turno nocturno, transitaba por la colonia San Roque. En horas de la madrugada, vio caminar por la calle a una niña sola, aproximadamente de 9 a 10 años de edad. El taxista
Leyenda de la esquina de La Tucha
Leyenda de Mérida Yucatán. Así, le dicen a un mono parecido al mono araña, chico y feo, sus orines y excrementos son los más fétidos e insoportables de olor que hay, en ese animal fue convertida una niña muy hermosa por una bruja
Los Ermitaños de Hidalgo
Leyenda de Hidalgo. En La época colonial, en un poblado de Hidalgo, una de las fincas más ricas de ese lugar vivía un terrible hombre adinerado solo, sin mujer e hijos, ningún pariente, su vida era un secreto. Era dueño de otras
Volver a morir, del Cementerio de Belén
Cuentan, que en el Cementerio de Belén en una noche se oyó un ruido muy fuerte en el lugar, se oyeron quejidos largos y lastimeros después se escuchó un ruido de piedras, cuando amaneció, las personas se arremolinaron junto a la
Regresó para ceder su tumba
Leyenda Temax Yucatán. Lo enterraron vivo, salió y fue a su casa. Don Antonio murió del corazón y lo sepultaron, cuando despertó, se dió cuenta, que lo habían enterrado, empujó y empujó hasta que logó salir, para ceder esa
Era carne de Frances: leyenda de Puebla
Leyenda de Puebla. Durante el prolongado, destructor, cruento y heroico sitio que sufrió la ciudad de Puebla en 1862, surgió esta leyenda en el populoso barrio El Carmen, que era el límite entre los beligerantes franceses sitiadores y
Promesas del Más Allá. El Sansón Ibérico
Leyenda de Nuevo León. Por los años 1905 Monterrey era una ciudad muy tranquila, por la calle de Comercio hoy llamada Morelos, había sitio de coches jalados por caballos. Uno de los cocheros Don Goyo era un hombre amable, atento y