El fantasma del Matadero y el Convento de Monjas

(23 2020) Leyenda de Mérida. La esquina del matadero viejo y El fantasma del Convento de Monjas de Mérida.  Calle 66 x 67, las esquinas desde la época Colonial se les daba el nombre por algún evento que haya pasado o solo por un objeto. Esta leyenda es de un romance del siglo XVIII, como siempre unos jóvenes se querían pero el papá de la muchacha no quería al chamaco. Por ser un pobre diablo. Mandó a su hija al convento de Monjas.

El fantasma del Convento de Monjas de Mérida

El enamorado no sabía donde estaba la novia, La buscó, esperó y esperó. Pasó el tiempo y no volvió a saber nada de su amada. Se resignó y no quería enamorarse otra vez estaba loco por ella. Pasaron algunos años, decidió entrar al seminario y se convirtió en cura. Lo enviaron como párroco de la iglesia de San Sebastián. Por las noches se torturaba dándose latigazos por que no podía quitarse de la cabeza aquella hermosa mujer. Fallece el clérigo que iba a oficiar la misa y recibir confesiones al convento de Monjas y lo a mandan a él a sustituir al difunto.

Se volvieron a encontrar

Después de mucho tiempo se volvieron a ver, el amor renació aunque ya era impuro en ese momento. Idearon en escapar lejos de todos y consumar su amor. Era de noche, el sacerdote se fue a buscar un caballo a San Sebastián mientras la religiosa lo esperaba en el convento. Cuando llegó con el corcel, ella se dispuso a bajar por el muro con la ayuda de una escalera, cuando descendía perdió el equilibrio y cayó, que ésta muere en el acto, se desnucó. El hombre no podía creer lo que había presenciado. El miedo lo invadió y escapó a galope en dirección a la calle 66 rumbo al matadero. En ese momento había muchas reces que estaban en ese lugar, el caballo al ver mucho ganado se asustó y los bovinos también que hubo una estampida, embistió al hombre y animal, el muchacho se golpeó con una roca dejando sus sesos expuestos.

Al día siguiente se encontraron dos cadáveres. Para que las almas descansen en paz, se colocó una cruz de madera en el callejón del convento. Según la leyenda, una sombra sale de la iglesia de San Sebastián llorando y pidiendo perdón se dirige al matadero viejo y al lugar donde muere la profesa y finalmente se va a la cruz de madera, se inca llorando suplicando perdón.

Párrafos y rezumen del texto, La esquina del matadero viejo, de Eduardo Aznar.  

Yyyy ya.

Autor: Elsy Alonzo

Aficionada a la lectura y escritura en especial a temas de leyendas.

Fuentes de información

1. es.m.wikipedia.org

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