El Callejón del Aguacate: Su oscura leyenda
Leyenda de Coyoacán México. En este lugar se oyen gemidos y llanto de un niño que muchos aseguran que su rostro de sufrimiento se forma en el árbol. En una calle angosta llena de casas coloniales y sombríos mitos. En el centro de
El callejón del suspiro: La muerte los unió
Leyenda de México. ¡Dios mío, dios mío he casado a una muerta, gritaba el cura! A mediados del siglo XVII en la Nueva España era prodigiosa en aparecidos y fenómenos sobrenaturales, en aquel enmonces todas las noches un ser
La carreta, el muerto y la bruja
Leyenda de Costa Rica. Se cuenta que una hechicera vivía en un caserón viejo en San José, poblado de carretas, gente humilde y sencilla. La bruja se enamoro de un hombre joven, el más guapo, gallardo, fuerte del pueblo. El muchacho era
El callejón del Muerto era solitario y sombrío
Leyenda de México. Ahora es la calle Republica Dominicana. Corría los años 1600. En la ciudad de Manila se deslizaba la vida de don Benito Bernáldez, de pronto su esposa fallece y a él se le acabó su tranquilidad le vino una
Viajó a la tierra de los muertos
Leyenda Mapuche. Sur de Chile y Argentina. Una pareja de jóvenes indígenas se casaron, la muchacha soñó con espinas, cuando despertó, su marido estaba hirviendo de calentura. La fiebre fue tan alta que al poco tiempo murió. Ella solo
Leyenda la Piedra del Muerto
Leyenda de Bogotá, Colombia. La madre maldijo a su hijo y se convirtó en piedra, muchos la consideran milagrosa, hasta van a pedirle que les ayude a encontrar trabajo. Las personas insisten que cada ves es más grande la Pidra del
Leyenda de la calle de la Merced
Leyenda de México. Un fraile por sus virtudes y vida santa era ejemplo para los novicios, en la pintura era venerado, de repente con terror vieron como abría la boca de la pintura De Fray Leonardo, y dijo, “no me alaben más, soy un
Los Chinos suicidas de San Sebastián
Los hombres orientales cuando ya estaban grandes de edad y enfermos, estaban conscientes que ninguno de sus compañeros se iba hacer cargo o no querían ser ayudados por nadie, tomaban la decisión de acabar con su vida. Eran hombres