Leyenda del Panucho ( a las tortillas le decían pan)

(15 2012) Don Agutín vendía comida, la iglesia tenía una explanada y ahí pregonaba sus ricas viandas, una de estas era un pan con frijol y vegetales encima, se le gastaba todo, además de sabroso, su clientela entraba o salía de la ciudad que compraban para el camino, otra cosa, a don Agustín le decían, don "ucho". Antiguamente a las tortillas le decían pan los españoles.

  Leyenda  Yucatán. Se cuenta que en la época de la colonia, en la iglesia de la Ermita de Santa Isabel,  está ubicada en el suburbio de San Sebastián que era el final de la ciudad de Mérida y de ahí se salía por el Camino Real que era la carretera hacia Campeche; la virgen Santa Isabel es la patrona de los viajeros.

Así que todos los que salían o entraban  a la ciudad,  tenían la costumbre de encomendarse a ella si iban a viajar o darles las gracias por regresar con bien, pues habían demasiados asaltos y crímenes, así que era un lugar muy concurrido por la gente; en las afueras de la iglesia hay una explanada en la que  vendía comida don Agustín.

A las tortillas le decían pan

Don agustín, vendía pan con frijol y encima viandas (a las tortillas les decían pan), tenía tanta clientela que hasta iban a comer gente que no salía de viaje; a don Agustín le decían Ucho, las personas cuando preguntaban ¿qué comiste? respondían pan de don Ucho, y de ahí con el paso del tiempo se le llamó  panucho.

Este es un antojito Yucateco, se hacen las tortillas a mano,  la parte de arriba cuando se cuece  se infla y se forma  un ollejo, se le hace una  pequeña abertura en que se le pone frijol colado, se fríe en aceite, después se adorna con pavo desmenusado ( asado con achiote), lechuga, rodaja de tomate, cebolla picada, aguacate, aparte se hace una salsa de chile habanero y se pone al gusto.

Autor: Elsy Alonzo

Aficionada a la lectura y escritura en especial a temas de leyendas.

Fuentes de información

  1. school.slgus.com

Publicaciones relacionadas

Leyenda del Alto Rey y el aceite de la cueva

Leyenda de España. Tres hermanos envidiosos y el aceite de la cueva. En el Sistema Central situada en la sierra al nornoroeste de la provincia de Guadalajara, su cima es sucesión de chicos repechos enfilados a lo largo de 3. 5 km,

El fantasma indefenso, es una niña

Leyenda de México. El espectro de una niña aparece siempre en esa casa, sale y entra a las habitaciones como que está buscando algo. Durante la noche los que viven en esa casa la ven. La leyenda cuenta; que una señora con su hija de

Leyenda, el ladrón del cementerio

Leyenda de Mexico. Hace muchos años en la época de la colonia había una anciana de alta estirpe descendiente de uno de los conquistadores. Esta señora vivía sola en una vieja casona que parecía que se iba a caer de un momento a otro.

La Miseria, Leyenda Criolla

Se cuenta que había un individuo llamado Miseria y era herrero. Estaba cansado de la pobreza que no tenía ni para darle de comer a su familia y le entregó su alma al diablo por tres bolsas de oro. Pero en un año satanás venía a

La leyenda de la Virgen del Roble

Leyenda de Nuevo León. Es una de las tradiciones de más arraigo que hay es la que se relaciona con la Virgen del Roble. Patrona de la Arquidiócesis de Monterrey. Pasó en el año 1592, Fray Andrés de León misionero franciscano colocó

El ahorcado de San Andres Tuxtla y La leyenda del Ahorcado

Leyenda de Veracruz. Se cuenta, que un joven de nombre Fernando salió de su trabajo más tarde que de costumbre pues hizo horas extras. Vivía bien lejos y pronto se iba hacer de noche, así que decidió tomar un atajo para llegar pronto

Leyenda La Carbonera de Chuburná Puerto

Leyenda de Chuburná Puerto Yucatán. Desde alta amar, por las noches, algunos pescadores cuentan que ven a lo lejos grupos de incendios, en los terrenos de la carbonera.  Y en la playa se ven como fogatas y gente a los lejos.   Se

Ahorcaron a un difunto: Leyenda Colonial

Leyenda de México. El 7 de Marzo de 1647 los vecinos de la Nueva España que transitaban por las calles delante de las Casas Arzobispales, como a las nueve horas de la mañana, veían admirados un evento muy frecuente en aquella época.